Estas directrices fueron aprobadas por el Consejo de Seguridad Alimentaria de FAO. Su finalidad es servir como referencia y proporcionar orientación para mejorar la gobernanza de la tenencia de la tierra, la pesca y los bosques con el objetivo primordial de lograr la seguridad alimentaria para todos y apoyar la realización progresiva del derecho a una alimentación adecuada en el contexto de la seguridad alimentaria nacional.
Si bien es un instrumento no vinculante para los estados ni para las empresas, puede servir igualmente cómo guía y fundamento para resolver conflictos territoriales y ambientales.